Organizaciones internacionales de derechos humanos presentaron un amicus curiae ante la Sala Primera de la Corte de Apelaciones del ramo penal de Guatemala, en el juicio que reinició el 16 de marzo de 2016 contra el ex dictador José Efraín Ríos Montt y su jefe de inteligencia, José Mauricio Rodríguez Sánchez, autores intelectuales del genocidio Ixchil durante el conflicto armado. El amicus desarrolla argumentos de derecho a favor de la separación de los procesos para ambos acusados.
Según lo determinara una corte nacional, Ríos Montt muestra deterioros en su salud mental que lo incapacitan para enfrentar un juicio público y penas de prisión, y por esta razón, según la legislación guatemalteca, su procesamiento puede ocurrir a puerta cerrada. Sin embargo, esta misma regla no es aplicable para Rodríguez Sánchez, su juicio debe ser abierto al público y a la prensa. Como indica el amicus, al hacerlo así Guatemala estaría cumpliendo con sus obligaciones internacionales de garantizar el acceso a la verdad, la justicia y la información de los crímenes del pasado.